Cirujano Maxilofacial: el más adecuado para la Cirugía Ortognática

Posted 18 mayo, 2016

En la odontología se encuentran múltiples especialidades que constantemente están buscando mejorar la calidad de vida de las personas, así como su autoestima, algunas cirugías hacen que esto sea posible, el Cirujano Maxilofacial es el encargado de lograr un correcto funcionamiento Oral maxilar y facial, para lograrlo se emplea la tecnología de punta la cual permite llegar a la armonía que debe existir entre la función y la estética.

Una de estas intervenciones es la cirugía ortognática, procedimiento propio de la Cirugía Maxilofacial especialidad Odontomédica que modifica la posición de los huesos de la cara llevándolos a una correcta ubicación para masticar y lograr una cara proporcionada, armoniosa, equilibrada y bonita, es importante exponer que esta es la cirugía de los huesos del rostro, en donde el propósito principal es mover los dientes y los huesos de la cara a una posición adecuada logrando la estética, comodidad y funcionalidad que el paciente requiere y desea para su salud.

Cuando la persona llega a mi consulta, se realizan algunos estudios previos que darán la posibilidad de dar una predicción quirúrgica al paciente, en donde se trabaja para acomodar los dientes y luego, como cirujano maxilofacial, me encargará de ajustar los huesos de los maxilares. Junto a esto, al paciente le informó sobre los costos de dicha intervención así como el precio por honorarios de clínica que incluye anestesia y los derechos de recuperación.

La cirugía ortognática consigue la armonía facial que el paciente no posee, mediante el movimiento del maxilar superior, los pómulos y la mandíbula-mentón, creando así una cara más atractiva al ser proporcionada en sus dimensiones anteroposterior y vertical, y permitiendo que la persona pueda masticar con mayor comodidad y evitar de esta manera que pierda los dientes rápida y prematuramente, puesto que provee las soluciones a ciertas deformidades dentofaciales más comunes como:

Mandíbula retrasada o pequeña: los dientes inferiores se encuentran retrasados con respecto a los superiores, lo que impide que la persona mastique bien y posiblemente presente problemas al dormir, puesto que provoca que la persona no respire bien, creando las famosas apneas del sueño.
Maxilar superior alargado: la encía se ve bastante cuando la persona sonríe, la cara de esta es alargada y el mentón suele estar retrasado, por tal razón, a la persona le cuesta cerrar los labios.
Maxilar superior retrasado: los pómulos se encuentran aplanados y los dientes inferiores se encuentran atrasados, por lo que casi no se pueden observar.
Mordida abierta: los dientes superiores e inferiores están abiertos por lo cual no pueden encajar bien, dejando así un espacio que impide que la persona pueda cerrar bien la boca, así como masticar correctamente y con comodidad. También esto puede generar problemas para hablar, ya que provoca que la persona presente dolores constantemente.
Mandíbula grande: los dientes inferiores están adelantados, están por encima de los superiores, por lo cual las muelas contantemente están rozándose y el mentón está adelantado y es más grande de lo normal.
Asimetría facial o en la mandíbula: el mentón y los dientes no se encuentran en la línea central en la que deberían estar, por lo que estos se desvían constantemente a un lado provocando que el paciente presente dolores de cabeza y en el cuello. Se suelen observar problemas de mala oclusión y articulación en los maxilares.

Es importante mencionar que la cirugía ortognática se realiza mediante cortes en los huesos (osteotomías) que le permiten movilizarlos, fijándolos después en la posición adecuada mediante mini placas y tornillos (osteosíntesis); jugando en tres dimensiones, los huesos aportan la proyección adecuada y el soporte esquelético a los tejidos blandos, esta intervención deberá ser manejada por un Cirujano Maxilofacial, quien es la persona idónea para realizarla y así obtener una recuperación satisfactoria y evitar problemas y complicaciones en un futuro.

Por lo tanto, si usted ha decidido realizarse dicha cirugía, es normal que esté lleno de dudas, por lo que a continuación expondré algunas recomendaciones y consejos que le ayudarán en el proceso de recuperación. Estas son:

Aplicar frio en la zona operada por 24 horas para disminuir los edemas y la inflamación si llega a presentarse.
Realizar una dieta líquida fría las primeras 24-48 horas luego durante las semanas siguientes se pueden incorporar alimentos blandos, y dieta más fibrosa luego de los 45 días de recuperación, procurando siempre evitar la comida demasiado dura para no lastimar los maxilares y dientes.
Tomar solo la medicación recomendada por el especialista y si este sugiere algún antibiótico, tomarlo en las horas indicadas.
La incapacidad para actividad física la determinará el cirujano.
Realizar actividad física con cuidado, es mejor esperar 3 meses para volver a practicar deportes de contacto, siempre teniendo cuidado de evitar golpes y demás situaciones de potencial riesgo.
Dormir en un ángulo de 30 a 45° durante dos semanas para reducir el edema en los maxilares.
Evitar conversaciones muy largas que le provoquen dolor, pero por lo general usted puede hablar normalmente al poco tiempo.
Mantener la higiene bucal para así evitar infecciones.
Acudir a los controles que el doctor le ha programado para evaluar la evolución de la cirugía y poder observar así la posición de la mordida, de los dientes y los maxilares.

Para finalizar lo invitó a que venga a mi consultorio para tener la oportunidad de resolver sus dudas. Como Cirujano Maxilofacial soy el más adecuado para realizar este tipo de intervenciones. Durante el proceso le daré las indicaciones que sugiero a mis pacientes para realizarse esta cirugía así como le proporcionaré un seguimiento antes y después con el objetivo de evitar complicaciones y hacer que la recuperación sea lo más satisfactoria posible. Para mayor información de los servicios que ofrezco en el mi consultorio, continúe explorando la página web oficial.